A) Ha superado el concepto tradicional, obsoleto y simplista de que al alumno se le educa básicamente prohibiéndole conductas. Para obtener alumnos disciplinados, no sumisos, es necesario clarificar en acuerdos comunes, el porqué de cada labor y definir corresponsabilidad.
B) Está sustentado en acciones encaminadas a insertar al alumno en un sistema valoral común a las familias que conforman nuestro Colegio.
C) Se basa en el reconocimiento de que cada ser humano tiene su propio ritmo de aprendizaje y éste se desarrolla sobre las particulares posibilidades de cada alumno y sus propias motivaciones. Por ello asumimos el reto de presentar estrategias didácticas variadas, orientadas al rescate de los mejores esfuerzos del educando.
D) Respeta los productos que el alumno entrega y evita recurrir a comparaciones frustrantes entre ellos mismos; sobre todo si dicho producto es el resultado de su máximo esfuerzo. Si éste no se presenta cumplimos con nuestra obligación de informar oportuna, honesta y objetivamente a los padres de familia, adjuntando, en lo posible, propuestas remediables factibles.
E) Se basa una propuesta que incluye la idea de convivencia consensuada, con lo cual rechazamos toda posibilidad de que entre el alumnado se presenten intimidaciones al imponer conductas. Consideramos que toda coacción enrarece el ambiente y daña las relaciones humanas.
F) No basa su éxito en la presentación de resultados sobre valorados ni en exámenes ensayados. Nuestra labor tiene un sustento fundamentalmente ético y por él respondemos plenamente.